Habrá aplausos y también silbidos de desaprobación cuando
publicamos nuestras intimidades. Porque esa actitud nos convierte en personas
públicas. Exponemos ...exhibimos, con o sin intención determinada situaciones
(buenas o malas) que provocan reacciones , que se traducen en comentarios
(buenos o malos) que nos hacen sentir bien (importantes) o mal cuando la
reacción es desfavorable o incita a una contra reacción.
Entonces, cuando hurgamos o escribimos en nuestro Facebook,
no lo hagamos como buscando chismes para envidiar, y menos aún para dejarnos
llevar por los comentarios irresponsables. Hagámoslo, en todo caso, con
paciencia, espíritu de tolerancia y sin fanatismos, sin envidia y egoísmos
estériles. By Carlos Alberto Mazó Miers
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